Brightburn

Brihtburn es un pequeño pueblo de Kansas donde la familia Breyer recibe un milagro cuando una nave extraterrestre cae cerca de su granja y trae consigo lo que llevan soñando por mucho tiempo y no habían podido concebir: un bebé. Un poco más de una década después el niño ha crecido y en vez de convertirse en Superman o Goku, Brandon Breyes es un psicópata, lo que en el papel suena genial, una película de terror donde ¿superboy? Acosa niñas de su edad, asesina a la buena gente de Smallville y trata de conquistar el mundo mientras ma y pa Kent Breyer tratan de detenerlo.

La idea de un Superman diabólico no es algo nuevo, la kryptonita roja, Uberman, Ultraman Y Omni-Man son ejemplos pero ambientarlo en su niñez y con la atmósfera de película de terror se hace una idea muy interesante, que además se puede interpretar como una mezcla con ¿qué hubiera pasado si Goku no se hubiera golpeado la cabeza de bebe? pero Brightburn se queda algo corta, la narrativa se siente plana o mejor dicho, muy directa, algo como, este es el punto de inicio A y llegamos al punto B, Fin.

Abejas y avispas

La mayoría de la película son una secuencia de momentos que crean tensión individualmente pero no hay una sensación de anticipación sino hasta su última media hora, así mismo tampoco hay un elemento que realmente sobresalga, no trae algo nuevo o se diferencia de las otras películas con niños malvados o de este estilo de terror con pocas excepciones, que principalmente son los padres en quienes, tal vez, realmente radica la historia, qué hacer si su hijo es un poderoso asesino psicópata invulnerable. Sus reacciones y proceso mental sí se desarrollan y es lo que finalmente logra enganchar dentro de la historia que supongo trata de hacer una comparación con la pubertad.

A pesar de sus debilidades, Brightburn puede ser entretenida y se disfruta más si medimos las expectativas, el nivel de crudeza en la violencia y que no se restrinja consigue marcarle una identidad tanto al personaje de Brandon como a la película. Visualmente logra captar nuestra atención, sea desde la estética que adopta el niño cuando acepta “su destino” o en los momentos de acción / terror que consigue aparentar un presupuesto mucho más grande de lo que costó (7 millones de dólares).

Está dirigida por: David Yarovesky, escrita por: Brian Gunn y Mark Gunn, hermano y primo de James Gunn que produce Brightburn y es protagonizada por: Elizabeth Banks, David Denman, Jackson A. Dunn, Emmie Hunter, Matt Jones, Meredith Hagner, Becky Wahlstrom y Gregory Alan Williams.