JACKIE

Dirigida por Pablo Larraín, escrita por Noah Oppenheim y protagonizada por Natalie Portman y la participación de Billy Crudup, Peter Sarsgaard, John Hurt y Greta Gerwig.

Negociación

Nos cuenta la historia desde la perspectiva de Jacqueline Kennedy, situada poco tiempo después del asesinato del Presidente de los Estados Unidos John F. Kennedy, seguramente semanas, recibiendo a Theodore H. White un periodista de la revista Times, porque quiere que salga un artículo contando la historia que a ella le parece que su esposo se merece y no más cosas como las que se han estado publicando en otros medios y que obviamente la tienen muy molesta.

Aceptación

Mientras se va dando la entrevista ella va reviviendo los momentos alrededor del asesinato, principalmente lo que sucede después, cómo ella lleva su duelo y lidia con los preparativos del funeral. Al mismo tiempo, vemos una reinterpretación del video de Jackie Kennedy, el tour por la Casa Blanca y eventualmente su conversación con un sacerdote. Todo dirigido a que conozcamos su experiencia y su proceso mental en diferentes momentos que se logran integrar y que se complementan para ampliar la perspectiva de los eventos.

Negación

Toda la película se centra en ella, en sus palabras, su comportamiento, sus emociones e interrogantes. Natalie Portman hace un trabajo excelente, sabe representar su dolor, la mezcla entre tristeza e insolencia en su forma de ser, además de su acento apegado a la Jackie real, que en un principio sobresale bastante pero sólo mientras uno se acostumbra.

La carga emocional del personaje no se apoya únicamente en la actuación, el sonido es increíble, se perciben los ruidos que se hacen al hablar y llorar lo que incrementa la emoción, el movimiento o pequeño temblor que hace la cámara cuando hay un primer plano a ella aumenta la sensación de confusión y desequilibrio.

Depresión

Pero superior a todo está la música de Mica Levi, las cuerdas frotadas,  como violín, chello y bajo, son interpretadas especialmente de tal forma que plasman la tristeza, el trauma, el duelo y la desorientación. La sensación de descenso y decaimiento que vive el personaje está narrado en la música y cada escena es mejor por eso. Duele escuchar la música, si no se supiera que está relacionada con la película no sería difícil tampoco identificar el tema y entender la melancolía y depresión de la que está impregnada.

Retomando la historia, el director relata muy bien ese choque entre expresar el dolor y tener que actuar como la figura pública que ella es. Observamos como todo debe continuar a un paso acelerado mientras ella no ha podido lidiar con su dolor y aun busca la forma de consolar a sus hijos.

Ira

La vemos tomar decisiones desde la ira y la incredulidad de lo sucedido, es muy importante para ella que se note la dimensión de la tragedia por la que están pasando y dejar clara la magnitud del legado histórico de John F. Kennedy.  Esto se ve con la obsesión que tienen alrededor de su sepelio y entierro, como forma de compensar la frustración de lo que él pudo ser y conseguir, el miedo de que no sea recordado y valorado y que su asesinato haya sido por nada. Pero al mismo tiempo esos miedos la hacen cuestionarse sobre su futuro y especialmente su papel en la historia, sobre su propia marca en el mundo y no sólo la de él.

Por: John Jairo Hurtado